SOMOS CULTURA VIVA
Este grupo procede de la capital, Quito. Se formó el 10 de noviembre de 2003 y desde entonces representa a Ecuador en todos los continentes. El conjunto folclórico « Somos cultura viva » está formado por dos etnias, como el país cuya riqueza cultural testimonia, pero con predominio de mestizos, lo que le permite presentar un programa completo y ecléctico, y reunir músicas y danzas de todas las regiones del país en un conjunto artísticamente muy logrado. Esta tierra que se extiende desde la costa del Pacífico hasta la profunda selva amazónica sigue siendo uno de los santuarios de la cultura inca. Sin embargo, sería inútil lamentar la muerte de los incas, el hundimiento de un imperio y las terribles condiciones en las que a veces se desarrolló la conquista española. A cambio, España dejó ciudades a menudo hermosas y los inicios de una actividad económica todavía importante.
El conjunto folclórico « Somos cultura viva » se centra deliberadamente en este aspecto de las cosas. Su objetivo es recopilar la mayor cantidad posible de información, música y danza de una tierra que fue una de las civilizaciones más activas del continente americano y del mundo. Le apasiona recopilar los elementos de una verdadera identidad ecuatoriana. Formada por un gran número de estudiantes apasionados por el enfoque y representantes de todas las profesiones, la compañía ha querido construir una síntesis de las riquezas culturales de su país.
Su repertorio abarca desde la costa poblada de negros hasta el centro poblado de incas, pasando por la selva, que, como decíamos antes, fascina a los etnólogos. Ha recreado los trajes de cada región. La orquesta que acompaña su espectáculo está formada por profesionales de gran calidad, capaces de tocar instrumentos primitivos y contemporáneos. Con preferencia por los primeros, que intrigan su curiosidad agudizando sus conocimientos.
El espectáculo se apoya sobre las tan numerosas fiestas del Ecuador y casi todas de origen religioso, y sobre las vidas de los mercados que son el gran asunto de las poblaciones incas difundidas en la puna. Y aún en los carnavales que son diferentes de una provincia a otra. Y también en los ritos paganos en los cuales el sol desempeña un papel eminente. Como en los otros lugares, las creencias en un sistema fundador muy diferente del anunciado por la iglesia. Ciertas fiestas, a la imagen de la del « Corpus Cristo », duran una semana entera. Otras tienen valor de revuelta contra el ocupante hispánico. Otras más antiguas son danzas de bienvenida. Las de la costa evocan más bien la influencia negra y a veces una influencia hispánica más marcada.
Y estas fiestas son acompañadas por la « Chicha », esta cerveza de maíz con la cual los indios saludan los grandes eventos de una vida olvidada y alimentan sus sueños de grandeza y de felicidad recobrados, como el recuerdo emocionante de una gloria pasada.